China Three Gorges, compañía eléctrica estatal china, mantuvo conversaciones con eléctricas europeas para evaluar su interés en comprar los activos renovables de Energías de Portugal (EDP) en Estados Unidos (EEUU), como parte de sus esfuerzos para allanar el camino a la compra de la empresa portuguesa, según dijeron tres fuentes conocedoras de la operación.

El objetivo de identificar posibles compradores es evitar posibles objeciones de las autoridades estadounidenses, que están analizando con lupa las adquisiciones chinas de activos estadounidenses en sectores estratégicos y podrían bloquear la oferta para comprar EDP, dijeron fuentes bancarias a Reuters.

China Three Gorges, una eléctrica controlada por el Estado chino, ha sondeado a firmas europeas como la italiana Enel, la española Iberdrola, la francesa Engie y las alemanas E.ON y RWE, dijeron fuentes.

Sin embargo, mientras que Engie estaría interesada en los activos estadounidenses, es improbable que las otras empresas busquen un acuerdo, añadieron fuentes.

Enel, Engie, E. ON e Iberdrola no quisieron comentar esta información, mientras que China Three Gorges no respondió a una petición de comentarios.

El tesoro estadounidense, que supervisa la Comisión de Inversiones Extranjeras en Estados Unidos (CFIUS) que examina operaciones de riesgos de seguridad nacional, no respondió de forma inmediata a una petición de comentarios sobre el plan de compra del grupo de energía EDP.

China Three Gorges lanzó en mayo una oferta por valor de 10.800 millones de dólares (MMdd) para hacerse con el control de EDP, la mayor empresa portuguesa, de la que ya tiene un 23 por ciento, aunque no hay garantías de que el intento sea exitoso.

La estrategia de buscar un posible comprador de los activos estadounidenses constituye un ejemplo de una empresa china que adopta medidas previas para mitigar los riesgos asociados con la intensificación del conflicto comercial entre China y Estados Unidos.

Las eléctricas europeas han atravesado una oleada de operaciones de concentración, con el fin de ganar escala, en parte debido a un creciente giro hacia las fuentes de energía renovable que está obligándolas a cambiar los modelos de negocio.

Acusaciones

Estados Unidos y China han cambiado los aranceles de importación sobre miles de millones de dólares de bienes su rival. Parte de la disputa se centra en las acusaciones de EEUU de que China ha robado propiedad intelectual estadounidense, una acusación negada por Beijing.

La CFIUS ha intensificado su escrutinio de las operaciones desde que Donald Trump se convirtió en presidente en 2017, y la inversión china en particular se enfrenta a un examen más concienzudo.

Durante los aproximadamente primeros 14 meses de la administración Trump, hasta el 1 de marzo, el comité bloqueó 12 acuerdos chinos, o casi la mitad de las 27 transacciones que revisó, y el destino de otras nueve aún estaba indeciso, según un análisis del bufete de abogados Pillsbury Winthrop Shaw Pittman.

Por el contrario, en 2016 solo cuatro acuerdos chinos fueron bloqueados de los 26 revisados, dijo el socio Tom Shoesmith.

El brazo de energías renovables de EDP, EDP Renovaveis SA (EDPR), opera en 12 países de Europa y el continente americano. Sus activos en Estados Unidos están valorados en alrededor de 6.700 millones de euros, incluida la deuda, en comparación con el valor empresarial de 13.900 millones de euros de EDPR, según análisis de Caixa Bank BPI.

“Las joyas de la corona de EDP son los activos renovables en EEUU que pertenecen a la cartera de EDPR. CTG (China Three Gorges) sabe que no obtendrían la aprobación de CFIUS para conservarlos si tuvieran una participación mayoritaria en EDP”, dijo una de las fuentes.

Los activos de EEUU constituyen una parte importante en el mercado de energía eólica del país, con una capacidad total de 4.382 megavatios y una cuota de mercado de alrededor del 7 por ciento.

La empresa francesa Engie, que planea cambiar todos sus negocios de gas a biogás e hidrógeno renovable para el año 2050, volviéndola 100 por cien ecológica, estaría interesada en los activos de EEUU, dijeron dos de las fuentes. El martes negó las informaciones de que estaba interesada en el conjunto de EDPR.

Dos de las fuentes bancarias y otra fuente familiarizada con la situación dijeron que Enel no estaría interesada en los activos renovables de EDP en Estados Unidos porque ya tenía un negocio de energías renovables en el país.

Es poco probable que las alemanas E.ON y RWE hagan una oferta porque están atadas a un acuerdo histórico para dividir los activos de Innogy entre ellas, agregaron las fuentes.

Desinvertir en los activos renovables estadounidenses podría apaciguar a los reguladores de Estados Unidos, pero el gobierno de Portugal se muestra reacio a la escisión de EDPR, considerándola una parte integral de la cartera de la empresa, dijo una de las fuentes.

“El gobierno portugués valora a EDP como su única compañía internacional e insiste en mantener todo junto”, dijo la fuente.

Un portavoz del primer ministro, Antonio Costa, refirió a Reuters a una declaración anterior de Costa, que decía que el Estado no tenía objeciones a la toma de control planeada por China Three Gorges.

Con información y foto de Reuters